A
continuación, exponemos nuestra reflexión grupal sobre los cambios
realizados en el Sistema Educativo Español con la LOMCE 8/2013 del 9 de diciembre.
Pruebas
de evaluación final para obtener el título de Graduado en ESO y el
título de Bachiller:
Todos
los miembros del grupo estamos de acuerdo en que no se deberían
realizar pruebas de evaluación final al acabar la E.S.O y
Bachillerato. Pensamos que si los alumnos son capaces de superar el
curso, no es necesario tener que presentarse a un examen con el que
se les evalúe el trabajo realizado durante todo el ciclo, teniendo
en cuenta que por alguna causa ajena pueden suspender dicho examen.
Con esta nueva medida, creemos que se limitan las salidas de los
alumnos, al darle la única salida de realizar un Grado Medio o
Superior. Además los alumnos que cursen Bachillerato, no tienen por
qué superar dos pruebas (la del centro y la de la universidad), ya
que se supone que si ha aprobado los cursos de Bachillerato, están
preparados para acceder a la universidad.
Dos
opciones en cuarto curso de ESO:
Dos
miembros del grupo estamos en desacuerdo con esta reforma, porque
consideramos que alumnos de 3º de la E.S.O no están preparados para
elegir si quieren seguir cursando Bachillerato o bien decantarse por
un Grado Medio. Creemos que el curso de 4º de la E.S.O es un curso
esencial para afianzar tus expectativas. Los otros dos miembros del
grupo consideran que esta reforma es necesaria, porque aquellos que
no quieren acceder al Bachillerato o la Universidad necesitan
información o recursos sobre el empleo.
Mayor
importancia de las «asignaturas troncales», diseñadas por el
Gobierno:
Todos
los miembros del grupo estamos de acuerdo en que el Gobierno elija
las asignaturas troncales con la ayuda de la Administración, y las
asignaturas específicas y de libre configuración sean elegidas por
la Administración. Creemos que es una buena medida, porque así no
recae toda la responsabilidad sobre una sola entidad.
Obligatoriedad
de la oferta de enseñanzas cuya lengua vehicular sea el castellano:
Todos
los miembros de grupo estamos de acuerdo en que todas las asignaturas
que se imparten en España deben tener como lengua oficial el
Castellano, aunque pueden ofrecer la posibilidad de darse en otra
lengua cooficial.
Educación
plurilingüe:
Todos
los miembros del grupo coincidimos en que es una buena medida aportar
mayor importancia y recursos al estudio de una lengua extranjera.